Terror en el Espejo Maldito - Juan Sebastián López

 Había una casa antigua al borde del pueblo, rodeada por un denso bosque oscuro y silencioso. La gente evitaba pasar cerca de ella, diciendo que estaba encantada por el espíritu de una mujer joven que había muerto en circunstancias misteriosas.

Una noche de luna llena, un grupo de jóvenes decididos a desafiar las supersticiones se aventuró a entrar en la casa. Puertas que crujían, pasillos estrechos y escaleras cubiertas de polvo daban una sensación de abandono y misterio.

En la habitación principal, encontraron un viejo espejo cubierto por un velo. Uno de los jóvenes, intrigado por su reflejo, decidió retirar el velo. Sin embargo, en lugar de su propio reflejo, vio una figura pálida y desfigurada que lo miraba fijamente con ojos vacíos y sombríos.

Aterrorizados, intentaron huir, pero las puertas se cerraron de golpe y las luces parpadearon y se apagaron. Escucharon susurros en las sombras y pasos que los perseguían por los pasillos.

Finalmente, lograron salir corriendo de la casa, pero nunca olvidaron la sensación de frío y terror que los había invadido. Desde entonces, nadie se atrevió a acercarse a la casa abandonada, y la historia de los jóvenes y el espejo maldito se convirtió en un relato aterrador que se transmitió de generación en generación en el pueblo.

Foto del espejo en donde la mujer pálida y desfigurada hizo la aparición